Un torneo visto desde dentro: Oslo Open 2017 (V)

La calle del #1 ya marcada, vista desde el tee y el green.
Ultima jornada de entrenamiento, esta con mi amigo Anders que se ha quedado a vivir con nosotros durante estos días. Anders es el jugador que mejor conoce los campos de Oviedo tras numerosas visitas a nuestra ciudad.

Hemos empezado temprano, y a las nueve de la mañana ya estábamos pateando en en el campo de prácticas. 

Hoy he podido, finalmente, ver todas las líneas de out marcadas, y el diseño de varios hoyos me ha sorprendido.

El primer hoyo me ha dejado un poco más tranquilo, la calle no es tan complicada como parecía y veo el par más fácil de lo que creía.

El #2 me ha dejado pensando. Inspirado por Anders, he decidido probar una bomba de derecha a izquierda, lo que llamamos un hyzerbomb en nuestra jerga, y me ha salido bastante bien. Este es un lanzamiento en el que no había pensado ya que, con la edad, he perdido bastante longitud en mis drives y no me parecía una opción viable. El lanzamiento de esta mañana me ha abierto un poco la mente y mañana temprano voy a probar de nuevo esta estrategia antes de empezar la primera ronda.

Las líneas en el hoyo más largo del campo, el #5, me han sorprendido de nuevo. Mi lanzamiento de drive va a ser corto y preciso y no va a ser nada fácil hacer un birdie, ya que mi segundo lanzamiento va a ser casi ciego.

En el #6 he sido víctima de una ilusión óptica creada por las líneas de OB del #5 y el #6, que se juntan en el horizonte dan un visión errónea de la calle. Uno de mis lanzamientos de prueba ha terminado fuera por esa razón. Es posible que este problema afecte a otros jugadores también.

El #8 ha cambiado por completo. La calle es mucho más estrecha y el green es ahora una isla. Un hoyo muy difícil en el que dudo que anote muchos pares, y en que seguramente veremos resultados de todo tipo.

En el #11, otro de los largos, he hecho un fallo en el segundo lanzamiento y he apuntado el segundo bogey de la jornada. Este será otro de los hoyos más difíciles.

En el nuevo #14 he salvado el birdie con un gran putt, pero mi drive ha sido de nuevo un poco largo.

El #15 sigue siendo un monstruo, con la calle más estrecha que nunca pero con la parte final más cerca del green isla. Sigue siendo un hoyo muy interesante.

El #16 y el #17 son hoyos en los que debería anotar al menos un birdie, aunque son bastante complicados técnicamente.

El #18, desgraciadamente ha perdido su esplendor y aura de hoyo de la muerte. El nuevo diseño ha quitado la isla y ha añadido una zona de dropaje que entra en juego cuando sales fuera en el primer lanzamiento. Esto significa que, en caso de un fallo desde el tee, lo probable sería hacer un bogey, algo totalmente diferente a las cifras que hemos visto a lo largo de la historia del torneo.

Anders y yo hemos hecho rondas muy parecidas. El ha anotado -2, yo he terminado con dos bogeys y cinco birdies y un total de -3. Mi mejor ronda desde que empecé a prepárame para el torneo. Espero que pueda mantener este nivel de juego a lo largo del fin de semana.

Tras una sesión de entrenamiento muy relajada, hemos puesto rumbo a la oficina de Cecilie para almorzar con ella.

Mañana antes de las 07:00 estaremos ya en camino del campo para comenzar con un torneo en el que puede pasar de todo.

Aquí os dejo un par de videos de Anders y sus drives:





Aquí tienes los cuatro artículos anteriores sobre mi preparación para el Oslo Open 2017: III , III y IV

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