Un torneo visto desde dentro: el Oslo Open 2017 (I)
Quedan tres semanas para mi próximo torneo de la temporada y esta mañana he cogido el coche y me he ido a las afueras de Oslo, en concreto al barrio de Stovner, al campo de Rommen Disc Golf, en el que se celebrará este clásico del disc golf noruego.
Los rumores en el mundillo del discgolf de Oslo dicen que el campo ya está totalmente preparado para jugar y he aprovechado una mañana triste y fría para comprobarlo.
Nada más llegar al campo y acercarme a la salida del nuevo primer hoyo he observado que los rumores eran falsos. Las canastas están todas en su sitio, pero aún faltan todas las líneas OB en las calles. A pesar de este contratiempo me he decidido a aprovechar la mañana y probar las novedades en el primer nueve.
El nuevo #1, calle, terraplén del green y green |
El primer hoyo es totalmente nuevo, aunque creo recordar que su green ya se utilizó durante algún torneo en los noventa, pero siempre de forma provisional. El hoyo es largo, de 226 metros, con OB ha ambos lados de la calle, y con el green situado en una pequeña colina. El nuevo green está todavía un poco salvaje, con el terraplén que lo rodea lleno de ramas quemadas, restos de los matorrales que lo rodeaban, y con la hierba del green bastante alta. La canasta está colocada a un metro de un terraplén muy pronunciado y que seguramente causará más que un problema en las aproximaciones. No va a ser nada fácil mantener el par cuatro del hoyo.
Los tres siguientes hoyos se juegan en su versión estándar, mientras que el nuevo cinco es la unión de los antiguos cinco y seis. Un par cinco de 268 metros, lo que lo convierte en el hoyo más largo del campo. Me ha sido imposible decidir mi táctica en el ya que faltan las líneas de fuera, lo mismo que sucede con el seis y el siete. Estos tres hoyos tienen calles paralelas y sin líneas los hoyos se juegan a ciegas, algo poco práctico.
Los dos últimos, el ocho y el nueve, no han cambiado desde la edición de hace dos años.
La conclusión tras las dos horas que he utilizado lanzado en el campo es que esta versión del campo es muy pesada físicamente hablando. Muchos hoyos largos con pares difíciles que van a poner a pruebas la fortaleza mental de muchos jugadores.
La próxima semana repasaré los últimos nueve y empezaré a pensar como voy a jugar el Oslo Open 2017.