Inauguración campo de Santiago de Compostela II – las primeras rondas oficiales en el Monte do Gozo

La segunda jornada de mi viaje a Santiago ha sido muy positiva, sobre todo a nivel personal.

Llevo sin poder entrenar desde finales de Mayo debido a una lesión en mi rodilla derecha. Los únicos lanzamientos que realicé desde entonces son los que hice en Oviedo antes del Campeonato de España para decidir si jugaría. Aparte de eso, no he tocado un disco desde esa fecha. He intentado recuperarme de mi cojera haciendo largos paseos y he intentado olvidarme del disc golf de competición. Por esa razón me he dedicado más a mis tareas como entrenador de fútbol y ha habido poca actividad en mi blog. Las últimas semanas he notado mejoría en mi rodilla y este sábado se ha convertido la gran prueba para ver si resistiría, al menos, un torneo corto. La prueba ha sido todo un éxito y me ha dejado muy contento.

La mañana ha comenzado con un desayuno en una de las cafeterías en las cercanías del hotel. Raúl y yo hemos aprovechado para empezar con una de las tareas más importantes que tenemos en CRK Disc Golf, la traducción de las reglas de juego del disc golf en su versión 2018 (su versión 2013, también traducción nuestra, está en la siguiente página de la PDGA). Tras el desayuno nos dirigimos al campo de disc golf de Monte do Gozo, donde nos esperaban muchos de los jugadores ovetenses del último campeonato de España y, como no, Iván y varios jugadores locales, entre ellos alguna jugadora de Ultimate, algo que alegra mi corazón.

Jed en la salida del #15
Los primeros 18 hoyos del día se han jugado por parejas. Algunas se han creado en el mismo campo, otras, como la que hemos compuesto Jed Farrell y yo, ya había sido apalabrada de antemano. Nos hemos divido en grupos y hemos decidido jugar ‘best shot’, utilizando siempre el mejor lanzamiento de la pareja y utilizando dos putts si era necesario.

En mi grupo hemos estado Isma y Raúl, Pablo que ha jugado solo, y Jed y yo. Ha sido un grupo con muy buen ambiente y con el énfasis puesto más en la diversión que en el resultado.

Durante la ronda he tenido el placer de conocer a Jed, un discgolfista londinense afincado en A Coruña, con el que llevo comunicándome varios años por Skype. Esta ha sido la primera oportunidad de vernos en persona y por eso hemos aprovechado para jugar juntos. Jed es un jugador de técnica elegante y con un gran putt. En la ronda nos hemos compenetrado a la perfección y siempre divirtiéndonos un montón. Hemos jugado sin presión y hemos conseguido sincronizar nuestro juego para siempre subsanar nuestros fallos: si uno ha fallado, el otro ha recuperado. De esa forma hemos hecho una ronda sin bogeys y con mucho birdie, anotando un total de 45, doce bajo par.

Los primos ovetenses Carlos Fernández Ortega y Miguel Caparrós han rozado nuestro resultado, pero con solo once birdies se han visto relegados a la segunda posición, seis por delante de los locales, y también primos, Iván y Pedro que han entregado una tarjeta de 52.

Nuestro anfitrión Iván ha recomendado un restaurante en la cercanía del campo para almorzar, y como el resto del fin de semana, ha sido todo un éxito. Hemos comido y hemos charlado hasta que nos hemos dado cuenta que si queríamos completar 18 hoyos más, deberíamos de darnos prisa.

La última ronda se ha competido individualmente y hemos hecho el recorrido en una tarde soleada y cálida que me ha hecho pensar en mi vuelta al invierno de Oslo. Mi grupo ha estado compuesto por Luis y Xurde, padre e hijo, ambos campeones de España en sus respectivas categorías, Raúl y yo. Otro grupo con muy buen rollo y exento de presión.
Mi grupo en los últimos 18. Pablo, Atila (que lanzó unos hoyos con nosotros) y Xurde

Mi ronda ha sido bastante buena. Sin bogeys y con mucho birdie. Noto que me falta consistencia, pero la técnica sigue siendo la misma. Esta sería la lección para los jugadores que están empezando: el entrenamiento siempre da resultado, tarde o temprano. La paciencia es lo más importante. Me ha alegrado poder vivirlo en primera persona. Una ronda de este tipo es la consecuencia de muchos años de entrenamiento serio y bien organizado.

He disfrutado mucho jugando con Luis, y sobre todo con su hijo Xurde. Un niño de doce años que demuestra un amor increíble hacia nuestro deporte y que siempre está interesado en aprender y mejorar. Estoy seguro de que he compartido ronda con un futuro campeón de España en la categoría Open. El tiempo lo dirá, pero su 59 en un campo de estas características me parece impresionante.

Los dos últimos hoyos los hemos jugado casi en la oscuridad, pero nos ha dado tiempo a finalizar la primera ronda de competición en el campo de disc golf de Monte do Gozo. Toda una hazaña.

He entregado una tarjeta de 46, solo uno por detrás de nuestro resultado en parejas de la mañana, y el primer record del campo oficial, que supongo será superado en un futuro no muy lejano. Jed ha terminado segundo con 53 y Carlos F.O. ha compartido tercera plaza con Iván con 54.

Iván ha organizado una cena en un restaurante del casco antiguo. En ella hemos hablado de todo un poco y hemos disfrutado de comida y bebida gallega. Al terminar hemos dado una vuelta por la ciudad y Ángela nos ha deleitado con una interesante clase magistral de la historia de la Catedral al pasar por el Obradoiro. La velada ha terminado en uno de los pubs más emblemáticos de la ciudad.

El domingo de madrugada, Raúl me ha dejado en el aeropuerto para iniciar mi viaje de vuelta a Oslo, que ha transcurrido sin problemas y con escala en Ginebra, una ciudad conocida para muchos de los discgolfistas españoles.

Iván, presidente del Compostela DGC, entrega el trofeo del torneo
El fin de semana ha sido todo un éxito a todos los niveles. Para mi ha supuesto una gran alegría poder ayudar a promocionar el disc golf entre los niños y haber podido completar mi primer torneo en más de medio año.

Gracias Iván, Ángela y todos los demás representantes del Compostela Disc Golf Club. Gracias también a todos los discgolfistas del Disc Golf Club Oviedo que han utilizado su fin de semana para el bien de nuestro deporte. Gracias, como no, a Raúl por representar como yo a CRK Disc Golf en este viaje.

Nos vemos en Febrero en el próximo Open de España 2018.

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