En los días previos al torneo suele pasar de todo y las tareas que realizamos son de lo más variado. Ayer martes empezamos con lo más interesante: el rediseño parcial del campo. Con la parte teórica ya realizada, lo que hemos hecho ayer fue poner en la práctica todas las ideas, comprobar si los cambios son factibles, ajustar lo que sea necesario y decidir los que se van a llevar cabo. Como siempre, he podido observar que teoría y práctica son dos cosas muy diferentes. De todas formas el resultado nos ha parecido bueno, y aunque sabemos que va a haber protestas, estoy seguro de que los jugadores van a divertirse.
El resto de la mañana y parte de la tarde lo hemos utilizado para reuniones, algunas muy interesantes.
Al final de la tarde Raúl y yo nos hemos sentado en una cafetería y hemos revisado el campo hoyo por hoyo, para recopilar todas las tareas que tenemos que llevar a cabo para que esté a la perfección el viernes. Por ahora todo está controlado.
